"Comparación: capacidad de supervivencia en Rusia respecto a Occidente.
Vivienda:
En la Unión Soviética todas las viviendas pertenecían al gobierno que las ponía a disposición de la gente. Al ser construidas por el gobierno se encontraban en lugares a los que el gobierno podía proporcionar acceso mediante transporte público. Tras el colapso del sistema cado uno se las supo arreglar para permanecer en su vivienda.
En occidente muy poca gente es dueña de su vivienda, y quienes lo son aún necesitan ingresos para pagar los impuestos de la propiedad. La gente sin ingresos o cuya vivienda pertenece a la Banca se enfrenta a la intemperie. Cuando la economía colapsa la mayoría acabarán engrosando las filas de los "sin techo". El transporte público hacia los promociones de los suburbios es inexistente y/o insuficiente, se depende del coche y del suministro de gasolina barata, lo que acabará en una migración masiva de personas sin techo hacia los centros de las ciudades.
Transporte
El transporte soviético era público prácticamente en su totalidad. Había automóviles particulares, pero eran tan pocos que el racionamiento y la escasez de gasolina no afectó a la sociedad. Toda la infraestructura pública fue diseñada con el mantenimiento ilimitado en mente y continuó funcionando después que la economía colapsase.
La población de EEUU y gran parte de occidente es esclava del automóvil, situación que se sostiene gracias a una compleja red de importación, refinado y distribución de combustibles. También se necesitan continuas inversiónes públicas en construcción y reparación de carreteras. Los mismos vehículos requieren un suministro constante de piezas importadas y no están diseñados para durar. Cuando este intrincado sistema deje de funcionar gran parte de la población quedará inmovilizada.
Empleo
El colapso económico afecta al sector del empleo público casi tanto como al empleo privado. Las burocracias gubernamentales tienden a ser lentas en actuar y también colapsan más lentamente. La ineficiencia de las empresas tiende a acumular inventarios y reservas que, una vez abandonados, quedan a disposición de los empleados que los usan para el trueque. Como la mayoría del empleo soviético era estatal, la gente tuvo de mas tiempo de reacción para pensar qué hacer después del colapso.
La empresa privada es mas eficiente en muchos ámbitos, por ejemplo en el de despedir a los empleados, cerrar sus puertas y liquidar sus bienes. Dado que la mayoría del empleo en occidente pertenece al sector privado, se puede esperar que la transición a una falta permanente de empleo sea repentina y traumática para la mayoría de la gente.
Familia
A la hora de enfrentar las dificultades, la gente suele recurrir a sus lazos familiares. La Unión Soviética experimentó un crónica escasez de viviendas, la que resultó en tres generaciones viviendo juntas bajo un mismo techo. Esto no les hizo felices, pero al menos estaban acostumbrados a vivir los unos con los otros. La expectativa usual era largarse cuando se pudiera.
En occidente las familias tienden a atomizarse, a esparcirse por el territorio. Suelen tienen problemas para tolerarse unos a otros cuando llegan las vacationes de verano o las Navidades, incluso cuando la economía va bien, las dificulatade para colaborar en tiempos de crisis les serán insoportables.
Dinero
Para sobrevivir los occidentales necesitan dinero. Un colapso económico suele ir acompañado de hiperinflación, la cual se come los ahorros. El desempleo rampante barre con los ingresos. El resultado es una población sin un céntimo.
En la Unión Soviética muy poco podía obtenerse con dinero. Éste se trataba como si fuesen fichas más que como riqueza en si misma. Muchas cosas como vivienda, educación, salud y transporte eran gratis o casi.
Infraestructura
Los consumidores soviéticos siempre fueron objeto de burla: nveras que sirven de calefacción para el hogar, etc. Si conseguías una tenías suerte y no digamos ya si lograbas que funcionase en tu casa. Pero una vez se lograba echarla a andar se convertía en una reliquia familiar sin precio, transmitida de generación en generación, robusta y de mantenimiento infinito.
En occidente los técnicos suelen diagnosticar que "no vale la pena arreglarlo". Un comentario así le sacaría los colores a cualquier ruso! Se quejaba un anciano ruso en EEUU al dueño de la ferretería que no podía venderle un muelle de repuesto para su colchón: "La gente tira colchones en perfecto estado, ¿cómo piensa que le voy a reparar yo el suyo?"
Alimento
El sector agrícola soviético era notoriamente ineficiente. Mucha gente cultivaba y recogía sus propios alimentos en tiempos de relativa prosperidad. Había almacenes de comestibles en cada ciudad abastecidos según los planes estatales. Los restaurantes eran escasos y muchas familias cocinaban y comían en sus casas. Ir de tiendas era una trabajo muy duro que llevaba consigo el acarreo de cargas pesadas. A veces se daban verdaderas competiciones de caza por un escurridizo cacho de carne que acechaba detrás del mostrador de la tienda. Así que la gente estaba más o menos preparada para lo que vino luego.
En occidente la mayoría de la gente busca su comida en supermercados abastecidos por camiones diesel refrigerados. A mucha gente le fastidia comprar y prefiere la comida rápida. Rara vez se cocina si no es en alguna ocasión especial. Esto es malo para la salud y el efecto en el pais es visible en las barrigas. Mucha gente sólo mueve las nalgas hacia o desde sus vehículos, está muy poco preparada para lo venidero.
Medicina
El gobierno soviético se prodigó en recursos para programas inmunológicos, control de enfermedades infecciosas y cuidados básicos de la salud. Operó directamente el sistema de clínicas estatales, hospitales y sanatorios. La gente con enfermedades crónicas frecuentemente encontraba motivos de queja y tenían que buscar asistencia privada si conseguían el dinero.
En los EEUU la medicina es sólo lucrativa, la gente no parece estar en contra de ello. Existen pocos ámbitos en los que no prive el motivo de lucro. El problema es que una vez que la economía se desvanece, también desaparece la posibilidad de obtener los servicios que otrora el lucro ayudaba a motivar.
Si los occidentales tenemos que vivir como los rusos, acabaremos hincando las rodillas en el suelo."
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